LAS ALIANZAS DEL RIBEIRO Y EL SUSHI EN EL FORUM
GASTRONÓMICO CORUÑA 2014.
Ribeiro y
sushi , una alianza que se comenzó a gestar hace ya muchos años y para muestra
suficiente observar la especial
atracción hacia esta D.O cada vez que una misión inversa visita Galicia.
Esta cata
de armonías ha sido conducida por la sumiller
de Gallaecia y presidenta de Vitislucus , Mercedes González y apoyada
por el propietario del Restaurante Japonés Kyoto de A Coruña, encargados de las
elaboraciones.
Con gran
afluencia de público, sabido es las pasiones que levanta el sushi y el ribeiro
y tras darle brevemente a la lengua, es decir, recordar un poco la fisiologia
del gusto y la localización de los sabores básicos (dulce, salado, ácido y
amargo), no sin hacer referencia al picante, esa reacción del trigémino a la
que los picantes de la comida japonesa nos tiene acostumbrados, González
introdujo lo que es la D.O , sus varietales, el carácter de sus vinos e
interpretó tres de los vinos genéricos , los
eligidos para representar la D.O.
Un monovarietal de treixadura que mostró fruta madura de
hueso y de pepita, notas florales del color de Galicia, el amarillo y un cuerpo
redondo. Un vino de fantástica naríz que se acompañó de una
sabrosa boca que aun mostrando sensación
dulce se mantenia fresco para recibir un nigiri
de lubina y un nigiri de atún rojo. El protagonismo en boca para la
sensación de adherencia del arroz que el vino limpiará y como no para la lubina
y el salmón. Para darle mayor complejidad y chispa al plato wassabi y jengibre
con ciertas connotaciones cítricas que enfalizan a la perfección con el vino.
Un albariño (90 %)
con pinceladas de treixadura , un vino alegre de nervio templado y con cierta
estructura que ha sabido acompañar sin restar protagonismo a un maki de salmón donde el protagonismo se
centra también en la sensación del alga directamente en el paladar, cierta
salinidad que este albariño sabe refrescar .
Finalmente un vino de grandes alianzas, un vino donde se ensamblan treixadura, godello, albariño, loureira, torrontés, lado, albillo y connotaciones que le aporta su paso por barrica.Potencia aromática y en boca, glicerol que le confiere suavidad y cierto dulzor.
Buena estructura y frescura que ha acompañado a la perfección un maki california roll (langostino,
aguacate, pepino, arroz y alga), esa versión americana donde el protagonismo
del contacto con el paladar es para el arroz pues el alga queda envuelta. Nos
encontramos además con un juego de texturas, crujientes fundentes,…..vino y
plato se continuan, buen recuerdo final y un equilibrio de sabores.
En conjunto elegancia y frescura que invita a comer y beber,
parejas que se entienden y se complementan.
Fotos: Ana Maria López Neira
Fotos: Ana Maria López Neira
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